El bicarbonato de sodio es uno de los ingredientes más útiles que tenemos en la cocina para aplicar a nuestra rutina de belleza. Lo puedes usar para mejorar casi todos los procesos que realizas en la regadera. Yo lo uso al menos una vez al mes o cuando siento que mi cabello está perdiendo brillo, mi piel se ve un poco opaca, mis piernas no son “aptas para falda” o mis dientes se están tornando amarillentos por el café.

Les comparto mi rutina de baño paso por paso. Además de tres cucharadas de bicarbonato de sodio uso aceite de bebé, shampoo, rastrillo, cepillo y pasta de dientes.

1. Los dientes

Yo prefiero lavarlos antes de meterme a bañar. Coloca la pasta sobre el cepillo y toca con ella el bicarbonato para que quede una capa muy delgada de polvo sobre la pasta. Con esto pasa el cepillo de arriba hacia abajo primero por tus dientes delanteros y después las muelas. No te recomiendo que hagas esto muy seguido porque hay dentistas que aseguran que te puedes lastimar los dientes, pero para emergencias funciona “de perlas”.

2. El shampoo

Yo tengo el cabello muy “mixto”, súper graso de arriba y seco de abajo. Por eso uso de vez en cuando demasiados productos que se acumulan en mi cabello y le quitan el brillo. Para combatir eso combino una cucharada de bicarbonato con la cantidad de shampoo que voy a usar, mezclo con el dedo para formar una pasta y la uso para tallar muy bien mi cuero cabelludo. Después de esto sentirás el pelo súper limpio, pero vas a necesitar usar acondicionador en las puntas.

3. La cara

Este es un tip que ya les habíamos dado hace tiempo. Con las yemas de los dedos mojadas toca el bicarbonato para que se te pegue un poco de polvo y úsalo para gentilmente frotar tu rostro. Esto te ayuda a exfoliar y retirar las células muertas. No necesitas nada más, no debes dejarlo por mucho tiempo, sólo talla y enjuaga.

4. Las piernas

Añade aceite de bebé al resto del bicarbonato y usa la pastita que se forma para tallar tus piernas antes y después de rasurarte. Asegúrate de limpiar bien el rastrillo después de cada pasada (o te vas a dejar todos los vellos). Si te sobra pastita exfolia tus brazos, pecho y espalda.

Saliendo del baño usa tu crema de forma normal (especialmente en el rostro) y cepilla tu cabello para que notes la diferencia.

¡Cuéntanos cómo te fue!