El 11 de marzo del 2011 hubo un terremoto en Japón, éste vino acompañado (o más bien fue seguido) por un tsunami que pegó en la costa este de la isla. El agua de mar inundó las instalaciones de una planta nuclear llamada Fukushima Daiichi. Se descompusieron algunos aparatos diseñados para que los reactores nucleares no se sobrecalienten, por lo tanto, se sobrecalentaron y empezaron a mandar material radiactivo a la atmósfera de nuestro planeta, no sólo a la de Japón.

La Compañía Eléctrica de Tokio (Tepco) no supo bien cómo reaccionar en el momento, su solución “provisional” (entre comillas porque después de dos años no se les ha ocurrido nada más) fue la de verter miles de litros de agua limpia al día hacia los reactores para mantenerlos a temperaturas bajas. El agua que echan a la planta se contamina radiactivamente y es almacenada en tanques que están cerca de la planta nuclear. Ya van como 400 millones de litros.

De aquí surgen tres problemas:

1.- Los tanques que se construyeron hace dos años no están diseñados para durar tanto tiempo y ya existen fugas directas hacia el Océano Pacífico.

2.- Hay agua subterránea que se contamina y de igual manera acaba en el Océano Pacífico.

3.- Se tienen millones de litros de agua contaminada y ningún plan concreto de qué hacer con ella.

En total estiman que 300 toneladas de agua contaminada acaba en el mar cada día. Esos son alrededor de 300 mil litros.

Se puede decir que existe un cuarto problema. Nadie parece tener soluciones lógicas y a largo plazo para atacar alguno de estos problemas. Según el Organismo Internacional de Energía Atómica, ésta es una emergencia nivel 3 (en una escala del 1 al 7), lo que significa que no hay riesgo de exposición significativa.

Sin embargo eso no justifica que el problema siga existiendo y que apenas esté llegando a las manos del gobierno japonés. Si se catalogara como una crisis internacional –porque “agua radiactiva” suena a algo que nos puede llegar a afectar a todos directamente- sería la oportunidad perfecta para que la humanidad empezara a trabajar en conjunto en proyectos que beneficien a todos. Dejar el nacionalismo atrás y darnos cuenta que realmente este tipo de problemas son mundiales y no sólo afectan a una región pequeña.

Puede que esté pidiendo mucho de un mundo en el que las revistas televisivas  se consumen más que las noticias internacionales, pero en fin, alguien tiene que ser optimista.

Aquí las cinco recomendaciones de la semana:

 

  • Museo del Niño. Todos los jueves de 19 a 23 horas, el Papalote Museo del Niño abre sus puertas a los jóvenes y adultos. Se pueden hacer todas las actividades que hacen los niños, desde hacer burbujas gigantes hasta acostarse en la cama de clavos; y al final se puede disfrutar de una agradable cena con jazz en vivo dentro del mismo museo. Un excelente lugar para ir en una cita diría yo.

 

 

  • AM. La última producción de los Arctic Monkeys. Salió a la venta el 6 de septiembre y seguramente lo van a estar escuchando por todas partes próximamente. Les dejo el video del primer sencillo Why’d You Only call Me When You’re High.

 

  • Animales feos. No sólo los tiernos pandas están en peligro de extinción, también hay muchos animales feos que están cerca de desaparecer si no hacemos algo. Les dejo los video de una asociación que le quiere dar una voz a estos desafortunados animales. Puedes ayudar votando por la mascota oficial de la asociación, les dejo uno de los videos.  http://www.youtube.com/watch?v=CsqgCLy-0qc&list=PLKh1g3D-Fed0K0tqxziRQTXReP2NqsmHw

 

  • NFL Monday Night. Empezó otra temporada de la NFL y si no vieron todos los partidos de hoy, no se preocupen, el primer partido de lunes por la noche (eso es el lunes 9 de septiembre) será el encuentro entre las Águilas de Filadelfia contra los Pieles Rojas de Washington a las 6 de la tarde.

Que tengan una excelente semana.