dinosaurio

Científicos anunciaron el descubrimiento en el sur de Patagonia de un esqueleto fosilizado increíblemente bien conservado y completo de un dinosaurio que pesaba 59,300 kg y medía 26 metros de largo con un cuello de 11.3 metros y la cola de 8.7 metros.

El paleontólogo, Kenneth Lacovara, quien descubrió el dinosaurio y llevó a cabo la expedición para desenterrarlo y analizarlo, dijo que el cálculo de peso lo hicieron a base de los huesos del brazo superior y el muslo.

Denominado dreadnoughtus, pesaba más que una ballena o una manada de elefantes africanos. Pesaba siete veces más que un tiranosaurio.

Este dinosaurio era el más grande y pesado en rondar por nuestro planeta de todos los tiempos.

Otro dinosaurio gigante descubierto en Argentina, el Argentinosaurio, pudo haber sido más grande, pero los restos que se han descubierto no indican con claridad un estimado de su peso. Otro grupo de científicos habían calculado que el peso aproximado del argentinosaurio era de 82,107 kg.

Aunque era un herbívoro, el dreadnoughtus no tenía problemas con los depredadores. Gracias a su tamaño y su cola enorme que seguro podía ahuyentar a cualquier depredador, seguro no tenía nada que temer, ni a los carnívoros más grandes.

El nombre Dreadnouhgtus significa “el que teme nada”, porque cuando eres tan grande como este dinosaurio, quizá no había mucho a qué temerle en el mundo.

El nombre también hace referencia a los poderosos buques de guerra denominados acorazados, dreadnought en inglés, que están diseñados para resistir cualquier tipo de ataque.

Seguramente estos dinosaurios pasaban sus días comiendo cantidades inmensas de comida para sustentar su cuerpo gigante. Es parte de un grupo de dinosaurios denominados titanosaurios que se cree que son los dinosaurios más grandes que hayan existido. El argentinosaurio encajaba en esta clasificación.

La mayoría de estos dinosaurios son conocidos por huesos individuales, pero los científicos que descubrieron al dreadnoughtus encontraron 45% del esqueleto completo.

Encontraron dos espécimenes uno a lado del otro, pero se cree que el más grande de los dos aún no había terminado de crecer.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.