Para algunos es un hábito nervioso, para otros la sensación trae alivio. Si eres aficionado a tronar tus dedos jalándolos o presionándolos hasta que oyes un crack, e incluso provocas muecas de dolor a tu alrededor por el sonido, esto es para ti…

A pesar de que muchos advierten que esta práctica es negativa, independientemente de lo doloroso que parezca, no existe ninguna prueba científica que compruebe que tronarte los dedos sea malo o te provoque artritis.

El agrietamiento de los nudillos repetidamente a lo largo de muchas décadas podría, en teoría, dañar al cartílago que cubre la articulación. Las comparaciones incluso se han hecho con el desgaste mecánico y desgaste acumulado con el tiempo en las hélices de barco”, dijo a la BBC la experta Claudia Hammond.

¿Pero por qué se oye tan doloroso? Sin importar como lo hagas, debes saber que el ruido que se produce cuando te truenas los dedos se debe a que aumenta el espacio entre las articulaciones al disolverse el líquido sinovial que las cubren, y el líquido se convierte en burbujas de gas que se revientan por el líquido que se apresura a llenar el espacio ampliado.

Una vez que las articulaciones se agrietan no pueden estirarse de nuevo durante unos 15 minutos, pues el líquido cubre el espacio y no hay lugar para que se formen las burbujas, después de ese tiempo se puede hacer.

Entonces, ¿cómo surgió la idea de una relación entre tronarse los nudillos y la artritis? Es cierto que las personas que ya tienen artritis a veces encuentran una grieta en sus articulaciones debido a que el cartílago de la superficie se dañó. Sin embargo, es raro que éste sea el primer síntoma y parece más probable que sea una consecuencia del daño, en lugar de una causa, dijo Hammond a la BBC.

Los factores de riesgo de la artritis que se han establecido son la edad, los antecedentes familiares de la enfermedad, y los accidentes anteriores con la mano, o una vida de trabajo pesado con las .

Lo que sí existe, aunque de forma aislada, son lesiones autoinfligidas de nudillos o con los pulgares y lesiones en ligamentos como esguinces de dedos, pero son muy raros.

Quizá más que hacerlo depende de la frecuencia con que te truenes los dedos, pues no es lo mismo hacerlo cada quince minutos que una vez al día.