La gente suele interpretar mensajes de texto ambiguos de manera negativa, especialmente si los envía una amiga.

Los mensajes de texto son una de las formas de comunicación más populares, en particular entre adultos jóvenes. Según estudios, gente entre los 18 y 24 años envían alrededor de 110 mensajes de texto en cualquier día dado.

El hecho de que nadie te esta mirando y que tienes tiempo de pensar en lo que te gustaría decir antes de enviar el mensaje son atributos que ayudan a disminuir la ansiedad de la interacción social en algunas personas, también puede ayudar a hablar de temas más personales sin que la persona sienta pena ni timidez.

Sin embargo, nadie había hecho algún estudio sobre cómo la gente ansiosa interpreta los mensajes que están recibiendo.

Problemas de ansiedad son las formas de enfermedad mental más común, afectando a un 18% de la población. La ansiedad social afecta a 6.8% de la población y es igual de común entre hombres y mujeres.

Irónicamente aquellos con mayor ansiedad social son más propensos a la comunicación a través de dispositivos electrónicos. Sin embargo, esta clase de comunicación también deja a la gente más susceptible a interpretaciones que causan ansiedad.

En un estudio, investigadores encuestaron a 215 estudiantes con respecto a sus interpretaciones de 24 mensajes ambiguos, incluyendo unos muy comunes como “me enteré sobre lo de anoche,” o “llámame.”

Le preguntaron a los participantes que interpretaran la intención del que envió los mensajes, ya si fuera negativa o amistosa. Los investigadores le dijeron a los participantes que la mitad de los mensajes provenían de una amiga y la otra mitad de un amigo.

Los investigadores esperaba que la gente con mayor ansiedad social interpretarían los mensajes como negativos, pero lo que no esperaban encontrar fue un desbalance de las interpretaciones basados por género.

En general, la gente en el estudio, tanto hombres como mujeres, tenían mayor posibilidad de interpretar un mensaje de texto de manera negativa si lo enviaba una mujer, pero las interpretaciones negativas principalmente provenían de hombres heterosexuales.

Principalmente estas interpretaciones negativas son debidas a la falta de indicaciones como el tono de voz. Aquí es donde los emojis ayudan. En persona dependerías de indicaciones como la expresión de la persona o el tono de su voz, el lenguaje corporal también tiene un papel importante en nuestra comunicación.

Para la gente que se comunica a través de dispositivos electrónicos, descubrir cómo superar estas ambigüedades es importante.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.