bullying

Recientemente, Enrique Peña Nieto habló en contra del bullying, o el acoso escolar, en su visita a Tamaulipas y celebridades mexicanos han hecho una campaña de Twitter donde se pueden ver con pancartas con el hashtag de #ElBullyingNoEsUnJuego. Imágenes preocupantes en la tele de niños abusando de otros y la comisión de derechos humanos en México anunció que trabajaría con maestros como parte de una campaña nacional contra el bullying.

“El gobierno se ha comprometido para volver las escuelas libres del acoso escolar,” dijo Peña Nieto.

La campaña contra la violencia se intensifico después de que un niño de 12 años murió en mayo después de ser aventado contra una pared por un grupo de estudiantes. Los reportes indican que el niño se había quejado con los maestros, pero fue ignorado.

“Creo que no le dimos importancia por muchos años, se consideraba como algo normal,” dijo Roberto Campa. “Claramente esto no es normal y las cosas han cambiado y cada vez nos damos cuenta más del problema.”

Campa dice que el bullying empieza fuera de las escuelas en las familias, pero que las escuelas al menos deberían ser un espacio protegido para los estudiantes.

“México es un país violento que tolera la violencia,” dijo Monica Garza. “Bullying se ha vuelto la palabra de moda y es hora de decirle a las cosas por su nombre. Asesinato no es bullying, es asesinato. Agresión no es bullying, es agresión. Muchos niños violentos en las escuelas no son bullies, son delincuentes en potencia.”

Recientemente hubo reporte de una madre que levantó una queja contra su hijo con la policía capitalina por bullear a otros estudiantes en su escuela. La madre sabía que su hijo abusaba, humillaba e incluso extorsionó a otros alumnos en línea. Fue después de ir a una conferencia sobre el bullying en línea que acudió a la policía.

Mario Cruz, un profesor en la Universidad Iberoamericana, dijo que el problema es viejo, pero que muchos mexicanos apenas están siendo expuestos a la idea de intentar detener el bullying.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.