Por un largo tiempo, se creyó que el síndrome de Ganser se manifestaba sólo en reos. Cuando se propagó al público general, los doctores comenzaron a cuestionar si existía o no.
En 1897, Sigbert Ganser notó que cuatro reos en la cárcel mostraban comportamientos muy raros. Fue llamado Ganser, psiquiatra, porque era evidente que los reos se encontraban confundidos o mentalmente ausentes. En ocasiones tendrían alucinaciones visuales o auditivos. Ocasionalmente entrarían en un estado semi-consciente, durante el cual emprendían tareas mecánicamente, luego cobrarían las consciencia completamente sin recoleto de lo que habían hecho.
En ocasiones perdían la capacidad de hacer cosas como caminar, hablar o comer. No parecía haber un patrón en las habilidades que perdían, parecía que en momentos al azar perdían la capacidad de emprender tareas al azar.
En su época fue conocido como locura de cárcel y la gente se preguntaba que qué clase de condiciones horribles tendrían que tener las cárceles para llevar a los reos a este nivel de locura. Luego notaron que gente fuera de la cárcel presentaba síntomas iguales. Para determinar esto, fue sorpresa que se pudiera descubrir con unas preguntas sencillas.
La gente con síndrome de Ganser no padecen de demencia total. Conseguir respuestas aproximadas es un poco como un juego de palabras donde escoges unas palabras al azar y las metes en espacios en blanco en un texto para crear una historia que no hace sentido.
A un paciente le hicieron preguntas, y aunque las respuestas tenían sentido, eran incorrectas. Decía que un gallo tiene 4 patas, un coche tiene 2 ruedas, habían 365 meses en un años, el mes era 8 en lugar de agosto, el año era 24 en lugar de 2004. Estas respuestas estaban entremezcladas con respuestas correctas, como una vaca tiene 4 patas. Dijo el paciente que el color de una pluma roja era blanca, sin embargo, pudo identificar correctamente otros colores y otros objetos rojos.
Todas las respuestas eran erróneas, pero tenían cierto sentido lógico. A diferencia de mentirosos compulsivo, gente con síndrome de Ganser no pueden controlar las respuestas equivocadas, se cree.
Algo que tienen en común los pacientes es que han salido de alguna situación traumática o estresante. El hombre antes mencionado estaba pasando por problemas financieros y tuvo que vender mucho terreno para salir de eso. Una niña cuya tía se había muerto estaba diciendo que su tía era su madre de verdad y mencionaba lugares ficticios donde creció.
Existe un debate entre psiquiatras de que si este síndrome se debería ayudar con medicamento psiquiátrico o si no es necesario dado que algunos de los pacientes adquieren este síndrome orgánicamente.
En lo que sí están de acuerdo los psiquiatras es que es una condición que se tiene que tratar de algún modo. Muchos con el síndrome tienen historiales de depresión y son tratados con antidepresivos. Si esto falla, como en el caso del hombre con problemas financieros, la terapia de electrochoque se usa a veces, pero sólo con el consentimiento del paciente. En este caso, el hombre mejoró con unas cuantas sesiones, junto con un poco de orientación psicológica en el cual le aseguraban que había hecho las decisiones financieras correctas bajo las circunstancias. El síndrome se disipó y fue liberado de su tratamiento.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.