Después de varias semanas llenándote de todos los almuerzos de las fiestas que acaban de pasar, te sientes mal y quieres sentirte más sano. Ves un libro de dietas o a alguien que sigues en Instagram hablando de una dieta desintoxicante que te hará sentir mejor y además te hará bajar de peso en unos días.

Suena como una buena idea, pero es una pésima idea. No caigas en la trampa de estas dietas populares por estas tres razones:

1. Un cuerpo sano ya hace un buen trabajo desintoxicando

Las dietas desintoxicadoras dicen ayudarte a limpiar tu cuerpo de toxinas como pesticidas y metales, pero tu organismo ya tiene sistemas increíbles para desintoxicar en tu hígados, riñones y colon. No hay datos que muestren que estas dietas hacen más de lo que nuestros cuerpos ya pueden hacer por sus cuentas en cuanto a reducir el azúcar, grasa y consumo de calorías.

2. La mayoría de las dietas desintoxicantes son demasiado bajas en proteína

Seis vasos de jugo verde cada día podría ayudarte a bajar de peso temporalmente, pero no entregará la proteína que necesitas para crear o mantener tu masa muscular. Esencialmente estás matando tus músculos de hambre, así que mientras podrías bajar de peso, mucho de ese peso es tu masa muscular.

3. Las dietas desintoxicadoras promueven una mala idea de la nutrición

Desintoxicar tu cuerpo no es un desorden alimenticio, pero definitivamente no es una manera adecuada para alimentarse. Además, después de 10 días de esta dieta, lo único que vas a querer es una hamburguesa de medio kilo de carne con queso y tocino porque no has consumido nada parecido en más de una semana. Además, al comer esta clase de comida después de tanto tiempo alimentándote mal, te vas a sentir mal de todo el cuerpo además de que no estarás feliz con tu imagen, provocando que quieras volver a hacer la dieta.

En conclusión: si quieres sentirte mejor, basta con eliminar la porquería que comas, comer proteínas enteras, verduras y granos. Deja el azúcar y bebe mucho agua y deja de hacer dietas extremas porque no sirven.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.