Ejercicio

La mala circulación sanguínea es un problema que se padece en secreto, pues aunque parezca extraño se trata de un mal que afecta a un cuarto de la población alrededor del mundo.

Dado que su función principal es llevar el oxígeno y los nutrientes a todas las células de cuerpo, una falla puede detonar enfermedades severas entre las que se encuentran problemas cardiovasculares, diabetes, derrame cerebral, artritis, hipertensión o entumecimiento muscular.

La mala circulación sanguínea puede ser provocada por diversos hábitos y una mala alimentación. Factores como colesterol alto, poca fibra en la dieta, consumir sal en exceso, fumar, sedentarismo, así como por una inadecuada hidratación.

Entre los síntomas que puede generar son pesadez de las piernas, calambres, mareos, pies y manos frías, pies hinchados, adoloridos y cansados, varices, infecciones que tardan en curar.

Ante este panorama, el doctor Néstor Navarro Flo, angiólogo, cirujano vascular y director médico del Centro de Enfermedades de Venas de Barcelona, explica que en épocas de calor los síntomas como hinchazón, pesadez y calambres, se pueden agudizar más.

Aquí te dejamos siete hábitos que pueden mejorar la circulación sanguínea:

1. Consume la menor cantidad de sal. Nutriólogos recomiendan la sal de mar sin refinar, ya que es una muy buena alternativa para prevenir los calambres. Un estudio realizado en 1983 encontró que el consumo de sal de mar no tuvo algún efecto significativo en el desarrollo de presión sanguínea alta de las personas.

2. Consume alimentos con vitaminas E, B12 y potasio. Estos nutrientes los encuentras en pescados grasos como el salmón, atún, ternera, huevos, pollo, lecha de vaca, yogur y queso. En alimentos vegetales se puede consumir en el plátano, hongos comestibles, germen de trigo, arroz integral, avena, cereales, soya, espinaca, papa, apio, semillas de girasol, frijoles, entre otros.

3. Aumenta el consumo de ajo. Al incluirlo en tu dieta puede mejorar tu flujosanguíneo, como lo confirma un estudio de la Universidad de Alabama en Birmingham, Estados Unidos.

4. Mantén una dieta baja en grasa saturada. Los alimentos de origen animal, aumenta el colesterol en la sangre que se deposita en nuestras arterias y llegan a taparlas provocando enfermedades del corazón.

5. Consume agua. La hidratación es vital para el buen funcionamiento del organismo porque nos ayuda a eliminar las toxinas del cuerpo. Tomar por lo menos un litro de agua al día será un buen inicio para mejorar la circulación sanguínea.

6. Evita fumar. El tabaco es un factor de riesgo que afecta el flujo sanguíneo y puede aumentar la presión arterial. Estudios afirman que los fumadores tiene 15 veces más probabilidades de sufrir problemas circulatorios.

7. Haz ejercicio. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el sedentarismo es la cuarta causa de muerte en el mundo, ya que está asociado con padecimientos del sistema circulatorio, como la cardiopatía isquémica o isquemia cardíaca.

Por ello, la OMS recomienda realizar al menos 30 minutos diarios de ejercicio e hidratarse lo necesario para mejorar la irrigación de sangre en nuestro organismo.

Con información de Agencias